Pues estoy convencido de que ni la muerte ni la vida, ni los ángeles ni los demonios, ni lo presente ni lo por venir, ni los poderes, ni lo alto ni lo profundo, ni cosa alguna en toda la creación podrá apartarnos del amor que Dios nos ha manifestado en Cristo Jesús nuestro Señor.
(Romanos 8:37-39)
El Señor te ama con amor eterno. ¡No hay nadie como tú en todo el mundo, eres especial para él! Dios te creó tal como eres y su amor por ti no tiene fin. Puedes estar segura de que no hay nada ni nadie que pueda separarte de su amor, ni aun la circunstancia más triste o difícil. ¡Descansa en el amor de tu Padre celestial, cobra ánimo y confía en su gran poder!